El PVC (Policloruro de Vinilo) es una combinación química de carbono, cloro e hidrógeno que proviene del petróleo (43%) y de la sal (57%). Se descubrió en el siglo XIX, aunque fue en los últimos años, cuando el metal y el plástico empezaron a competir por coronarse como material por excelencia para la fabricación de ventanas.
Características:
- Perfiles fuertes. El PVC es menos rígido que el aluminio y se dilata más que el segundo. Por tanto, sus perfiles tienen que llevar unos refuerzos de acero en su interior para garantizan su estabilidad, por eso sus perfiles son un poco más pesados y anchos que los de aluminio, lo que reduce ligeramente el tamaño del cristal
- Ligero. Aun que las ventanas PVC son ligeramente más pesadas que las ventanas de aluminio por su refuerzo de acero, siguen siendo más ligeras que las antiguas de madera. Y algunos fabricantes tratan de sustituir los refuerzos de acero por otros elementos como fibra de vidrio.
- Duradero. No se oxida ni se corroe. (Su vida útil es de aproximadamente cincuenta años)
- Ahorro energético. El PVC es un plástico, y su conductividad térmica es muy baja, de hecho, es considerado un material aislante. La ventanas suelen estar compuestos por varias cámaras de aire, por ello garantiza un buen aislamiento acústico, es resistente a la condensación, tiene una elevada resistencia al aire y estanqueidad del agua.
- Gran variedad de acabados. Foliado color, imitación madera, etc.
- Material difícilmente inflamable. La ventana deja de arder cuando para el fuego, es autoextinguible. En el comportamiento ante el fuego una ventana buena de PVC tiene una clasificación M1. Son necesarias temperaturas entre 300 y 400 °C para provocar la ignición del PVC.
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